jueves, 23 de enero de 2014

Blanco y Negro

Ah, la tenencia. Resulta injusto, ingrato y hasta ridículo que una persona que compra un carro, tenga que pagar tenencia.

Decimos que es injusto porque quien compra un carro, invierte su dinero y fomenta la economía.

Es inexplicable que se tenga que pagar por poseer un bien mueble, cuando el gobierno debiera aplaudirle a un ciudadano que haga esa compra.

Si usted, estimado lector, le busca una explicación al uso de la tenencia, ni se esfuerce: no existe.

Es verdad que con ese ingreso el gobierno realiza obras en beneficio de la sociedad, pero…

… El gobierno debe buscar la forma, otra manera, de obtener ese ingreso y no perjudicar a quien invierte en la compra de un carro.

 Y a otra cosa, mariposa. 50 por ciento de las llamadas, por mi caída en el baño, fueron de consuelo.

El otro que por tontejo. Por lo tanto, declaro un empate técnico.


Pido disculpas por las dos ausencias de la semana. Usted sabe que un propone y Dios dispone.

No hay comentarios:

Publicar un comentario