viernes, 18 de marzo de 2011

Política en su Tinta

¿Reconciliación?

Se inició la reconciliación política dándole un coscorrón a sus adversarios. Eso es exactamente lo que sucedió en la integración de la presidencia de la Gran Comisión y en las comisiones de trabajo en la nueva Legislatura del Congreso del Estado. La fracción del PAN no tenía mayoría simple ya que de las 21 diputaciones sólo cuenta con nueve y, el resto que son 12, pertenecen a la oposición. Pero, que cree usted, se apropió, por usar una palabra que suene mas decente, de la Gran Comisión con la suma de tres votos de diputados de la oposición. Se especula que fueron del PRD y del Panal. Bajo esta perspectiva, se aprecia que podrían ser algunos personajes perredistas y panelistas quienes puedan acompañar en su equipo de trabajo al nuevo ejecutivo, a partir del 5 de Abril. Mal empieza la semana para el que ahorcan en lunes, dice un dicho popular. Por otro lado, también la fracción panista, ahora con mayoría simple, se hizo de las principales comisiones dentro de la estructura del trabajo parlamentario. Como por ejemplo, la comisión del Órgano de Fiscalización Superior, que es la que maneja los resultados de las revisiones y auditorias a las cuentas públicas del gobierno del estado, los cinco Ayuntamientos y del Tribunal Superior de Justicia, quedó en manos del neopanista Ernesto Ibarra, ex-Delegado en Cabo San Lucas y gente cercana a Narciso Agúndez, a Oscar René Núñez y al grupo empresarial de Los Cabos. Las cosas cambian para que todo siga igual. Las señales que mandan son que el PRD será el aliado incondicional del PAN en los próximos meses y años en nuestro estado. Otra señal, al parecer, es para los alcaldes electos de oposición, con excepción del PRD, por supuesto. Es decir, te lo digo Juan para que lo entiendas Pedro. Después se molestan porque algunos medios les digan que son un mismo proyecto. El termino "reconciliación política" fue usado casi en forma cotidiana por los partidos en el pasado proceso electoral, bajo un esquema de lo pasado, pasado. Se oía y se oye muy bien. Sin embargo, los que ganaron ya ganaron y ese buen deseo quedó como las llamadas a misa o como una carta a Santa Claus. Que pena.

Los votos

Marcos Covarrubias deberá tomar en cuenta que 82 mil ciudadanos votaron por el PRI y que serán celosos vigilantes de lo que haga o deje de hacer. También tiene que recordar que 52 mil electores sudcalifornianos votaron por Luis Armando Díaz, del PRD. Y que juntos, suman 134 mil ciudadanos que no estuvieron de acuerdo en que fuera gobernador. Es decir, más de 30 mil de los que votaron por él, que fueron 101 mil. Se suponía que en la conformación de la gran comisión y de las comisiones legislativas, se mezclarían. Diputados de todas las corrientes políticas, no solamente del PAN o del PRD. Por eso decíamos ayer que Marcos envió una primera señal muy mala para los sudcalifornianos. Esos ciudadanos que votaron por el PRI y los que votaron por el PRD, pero sobre todo los primeros, estarán muy pendientes de cómo Covarrubias integrará su equipo de trabajo. Y si en lugar de escoger a ciudadanos capaces y honestos prefiere a perredistas ya probados, entonces, definitivamente, los sudcalifornianos se habrán equivocado al elegirlo gobernador.

El caso Zavala

Llamó la atención el caso Zavala. Los votantes de su distrito, en una gran mayoría, se manifestaron en el congreso el lunes 14, exigiendo su presencia. Y cuando Omar llegó al congreso, fue ovacionado y sus simpatizantes mostraron júbilo y alegría. Es raro que esto suceda. Y cuando el martes 15 se le tomó la protesta a Zavala, esos mismos simpatizantes explotaron en manifestaciones de apoyo, sin precedente cercano en la historia política de Baja California Sur. Naturalmente, eso compromete más a Zavala para que sea un diputado digno representante de sus electores. Hasta el martes, que el Gran Arquitecto del Universo los bendiga a todos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario