Pues La Paz se sigue pareciendo a
una ciudad en guerra. Ni Alemania estuvo tan caótica, ni Japón, después de las
bombas de Nagasaki e Hiroshima.
Este no es un caos. Es un caón desorden. Hasta cuando los genios del
gobierno se organizaran para pavimentar calles sin destruir la vialidad.
Uta, mano. Yo creo que ni
volviendo a nacer. Aquí aplicar perfectamente eso de mídete, pésate y actívate.
Hay que ver el asunto de manera positiva. Salga de su casa en pants y
tenis, en cuanto salga el sol, y para las 10 ya estará en su destino. Sobre todo,
optimismo.
Soy diario testigo del coraje, la
desesperación y las mentaditas, todos los días a esos funcionarios irresponsables.
En otro tema, resulta incongruente que mientras el gobernador tiene
frases de admiración y respeto hacia Peña Nieto…
Los legisladores federales
panistas mantienen su campaña de desprestigio y linchamiento contra Ricardo e
Isaías.
Es tanto el coraje de Carlos Mendoza que, si por él fuera, el pueblo desaforaría
a esos legisladores.
La pregunta inocente es: ¿qué
tanto lograrán los legisladores federales panistas? Se los dejo de tarea.
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