Durante los diferentes períodos en que conduje
Contacto Directo, en la XENT, me pasaron algunos detalles.
Por ejemplo, cuando me
habló la inolvidable Panchita Avilés, para denunciarme que la policía judicial había
golpeado a sus hijos.
Cuando le pregunté si había denunciado los
hechos, me dijo con mucha sinceridad: “nombre, me los joden más”.
(Panchita Avilés fue
una lideresa de colonias populares que llenó toda una época política en la
ciudad de La Paz).
En cierta ocasión, se presentó don Pancho King
en la cabina, y me escribió en un papelito la frase “hagamos un puente musical”.
No tenía yo la menor
idea de qué era eso. Así que dije: bueno, hagamos un puente musical. Y la
operadora puso un disco, que es, en realidad, hacer el puente musical.
Eso me recuerda que la noche en que terminé mis
estudios en la Escuela de Periodismo “Teresa Zazueta”, en Culiacán, me fui a
Nogales, Sonora, contratado como reportero.
Al día siguiente de
haber llegado, el dueño del periódico me dijo: “a ver, Raúl. Consígueme la
bandera del periódico”.
Tampoco tenía la menor idea de qué era eso. Y lo
confesé abiertamente. El director fue por el archivo del mes del periódico y me
lo mostró.
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