Anda tan desorientado el presidente Calderón con el resultado de Michoacán, que ayer confundió al presidente de Uruguay con el de Ecuador.
Se le movió el ecuador al presidente, porque no ganó su hermana la Cocoa, que quedó convertida en chocolate la abuelita.
Pues el Peje se convirtió, de la noche a la mañana, en una especie de Dalai Lama mexicana: ahora es todo amor.
El Grupo Reflexión prepara un homenaje al distinguido maestro Ricardo Fiol Manríquez, para el miércoles próximo.
Hoy, el grupo convivirá con Espino Barrientos, rebautizado como el puerto, por aquello de los barros y espinillas.
Dice el gobierno que habrá dos nuevas presas. ¿Van a meter al bote a invasoras de Los Cabos?
¿Se refieren a socias de César Uzcanga, en la invasión de La Ballena?
Si no nos hubiesen defraudado, no estaría así México, dijo el Peje a Carmen Aristegui. Es cierto, estaríamos mil veces peor.
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