Pues Rosa Delia se salió con la suya y el IEE
aceptó la denuncia. El que ríe al último, IEE mejor.
Cuentan que el “autor”
de las acusaciones en contra de la alcaldesa fueron una brillante idea de su secretario
técnico, don Alfredo Reyes Cervantes.
Si hubiera alguna multa, lo ideal sería que la
pagara el señor Reyes Cervantes con los dos chequecitos que recibe, de la SEP y
del Ayuntamiento.
Pues con la novedad de
que el IFE ya le copió el sistema a la Elektra y a la Coppel y permitirá que el
PRD pague una multa de 25 millones en cómodas mensualidades de 3 millones.
Obviamente el sistema de pagos no convenció mucho
a Rosa Delia, pues de por sí la pobre anda batallando para pagar a los dos o
tres empleados que le quedan al PRD.
O sea que lo que fue
un gran partido, ahora es una pequeña agrupación tribal.
Lo que fue el PRD, se convirtió, gracias a Leonel
y al Peje, en una sociedad de padres de familia, más pequeña que la de la
escuela primaria de El Calandrio.
Pues las calles están
muy bonitas, no cabe duda, pero el desempleo sigue siendo un gravísimo problema
en Baja California Sur.
Y ni modo que la gente se coma a mordidas el pavimento
hidráulico, para satisfacer el hambre.
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