No se si será cuestión
del clima pero las relaciones entre Narciso y Marcos, el gobernador, están congeladas.
A mí, mi familia y uno que otro amigo me está
aplicando “la ley del hielo”.
Las pocas mujeres
valientes que se animan a caminar por el malecón en la mañana, son un apetitoso
buffet de carnes frías.
Confieso, que en este punto, se me congelaron
las ideas. Les debo los otros cuatro párrafos que faltan. No se crea, es una
broma.
Donde las relaciones
tampoco son muy cordiales y tibias, es entre la Procuraduría General de
Justicia, y uno que otro juez y MP del Fuero Común.
Caramba, tanto que me gustan las heladas… pero
en el verano y liquidas, no como las de ahorita.
Por su falta de cortesía
el Grupo Reflexión les aplicará la ley del hielo a los diputados Valdivia y
Zavala.
Por lo menos, mientras mejoran las condiciones
del clima.
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